De lunes a viernes, alrededor de 600 Tulancinguenses acceden a desayuno y comida con un importe de 10 pesos, atendiendo a lo establecido en las reglas de operación del programa federal comedores comunitarios derivado de la estrategia de Sedesol “Sin hambre”.
La gestión de los comedores comunitarios se realizó directamente por parte del mandatario local Fernando Pérez Rodríguez ante autoridades de la Sedesol, para cumplir los objetivos de combate a la pobreza, siguiendo las metas planteadas desde nivel federal.
En el municipio operan comedores comunitarios en Huapalcalco, Santa Ana Hueytlalpan, Jaltepec, así como en Rojo Gómez y la Cruz.
En cada espacio se proporcionan 240 raciones de las cuales 120 son desayunos e igual número en comida.
El horario de servicio al público en general es de 8:00 de la mañana a 15:00 horas; los menús son diferentes cada día y están apegados al plato del buen comer.
Los comedores se encuentran ubicados en puntos accesibles a los vecinos y existen dos opciones para la dotación del desayuno y comida: una de ellas, es cuando se sirve al interior del espacio y en otra opción las personas llevan aditamentos para transportar las raciones a sus domicilios.
Regularmente las mismas personas que se benefician del desayuno también solicitan el apoyo de comida que es preparada por cocineras voluntarias, es decir personas de la misma comunidad que realizan labor social.
El primer comedor comunitario que entro en operaciones fue el de colonia La Cruz y posteriormente se incorporaron a las acciones de este año, los denominados: Santa Ana Hueytlalpan, Jaltepec, Huapalcalco y Rojo Gómez.
A nivel municipal, la Secretaría de Desarrollo Humano y Social es quién vigila la correcta operatividad del programa que tiene como objetivo aminorar los niveles de desnutrición en personas en situación de vulnerabilidad.
Igualmente, al proporcionar alimentos balanceados se evita el sobre peso y obesidad.
La primera dotación de insumos al municipio se registró en febrero y concretamente se etiqueto para el comedor La Cruz.
Cada mes, DICONHSA siguiendo la instrucción de SEDESOL entrega dotaciones de despensa y alimentos no perecederos para contar con insumos para la preparación de los desayunos y comidas.
Los 10 pesos de importe por desayuno y comida que pagan los benefieciarios, son destinados para la adquisición de perecederos, artículos de limpieza y mantenimiento de los espacios.
En cada comedor existe un comité comunitario, cuya función es de vital importancia para el cumplimiento de metas.
Conforme los lineamientos del programa los grupos de apoyo son: niños de 0 a 11 años, adolescentes de 12 a 19 años, mujeres embarazadas o en lactancia, adultos mayores, personas con discapacidad, migrantes y desempleados temporales.
