Grisel Alcíbar Cortés, directora de Ingresos indicó que en los primeros 25 días de implementación de la campaña de regularización a contribuyentes en rezago, se ha tenido respuesta favorable incluso de un 26.7 por ciento adicional, respecto al año anterior.
A la fecha se ha recibido el pago de 223 contribuyentes, lo cual representa ingresos por 531 mil 928 pesos, recordando que esta cifra corresponde a cuentas que formaban parte de la cartera vencida.
La mayoría de las 223 cuentas corresponden a predios urbanos aunque también se han acercado propietarios de parcelas y terrenos rústicos.
Es decir que la campaña abarca el total de superficies y busca beneficiar a contribuyentes que por alguna razón tengan adeudos de diversos años.
La mecánica de esta campaña consiste en el descuento en recargos: Hasta el 31 de octubre será del 80 por ciento y posteriormente en noviembre el 70 por ciento y finalmente en diciembre 60 por ciento.
El año anterior aprovecharon esta campaña más de 874 contribuyentes y en esta ocasión se espera mucha más afluencia dado el interés reflejado en las primeras semanas de campaña.
Para aprovechar el beneficio de condonación de recargos, únicamente se requiere presentarse en oficina de impuesto predial y será requerido el número de cuenta del contribuyente.
En caso de no tenerlo se les asignará una clave bajo la cual se imprimirá el cintillo con el saldo actual.
Gran parte de los contribuyentes hoy regularizados, tenía adeudos desde 10 a 15 años que sobrepasaban su capacidad financiera, sin embargo, con la campaña propuesta por el presidente Fernando Pérez Rodríguez su debito se redujo considerablemente, lo que permitió ponerlos al corriente.
Es importante destacar que la Dirección de Impuesto Predial no tiene personal que realice trámites fuera de oficina, por ello, cualquier deudor puede acercarse y buscar la solución más favorable a su condición de rezago.
En caso de que el monto de adeudamiento sea extenso, hay la posibilidad de convenios para pagos hasta en seis mensualidades.
Con esta campaña se evita que los deudores enfrenten el procedimiento administrativo de ejecución, el cual conlleva embargo de bienes, por negativa a regularizar débitos.